Estando fuera de casa, si no es para mejorar, mejor me quedo. Esta es una frase que mi padre repitió muchas veces y que cuando vino a Mallorca a principios de los 70 lo tenía en su mente cada noche al acostarse en el Hotel Playa Marina de Illetas, dónde también trabajaba.
Esto que os acabo de contar es algo que últimamente me pasa mucho por la cabeza cuando paseo, cuando voy, cuando vengo. No dejo de ver a gente esperando a que los supermercados de la zona saquen las sobras o productos caducados de fruta, verdura, carne, pescado... para coger estos restos, ves a las mismas personas a la misma hora cada día. Es cuando me hago la reflexión que se hacía mi padre cada noche al irse a dormir. Cuando veo desastres como los que sucedieron hace un par de semanas en la travesía de una patera morir cinco niños como los que tenemos cada uno de nosotros en casa felices con un helado en la mano.
Evidentemente la instituciones públicas tienen que tratar en serio el problema de la inmigración, la verdad es que no creo que sea un problema de que vengan más o menos. El problema es mucho más grave de lo que nos pensamos. Por dar un ejemplo, una vecina argentina me decía el otro día que quería cambiar de colegio al niño porque había muchos inmigrantes ¿? por lo que el nivel educativo era más bajo. Creo que el sistema podrá aguantar lo que pueda aguantar, pero no más de lo que pueda soportar. En esto me refiero principalmente a educación, sanidad y los principales servicios que ofrece el sistema público.
Esto que os acabo de contar es algo que últimamente me pasa mucho por la cabeza cuando paseo, cuando voy, cuando vengo. No dejo de ver a gente esperando a que los supermercados de la zona saquen las sobras o productos caducados de fruta, verdura, carne, pescado... para coger estos restos, ves a las mismas personas a la misma hora cada día. Es cuando me hago la reflexión que se hacía mi padre cada noche al irse a dormir. Cuando veo desastres como los que sucedieron hace un par de semanas en la travesía de una patera morir cinco niños como los que tenemos cada uno de nosotros en casa felices con un helado en la mano.
Evidentemente la instituciones públicas tienen que tratar en serio el problema de la inmigración, la verdad es que no creo que sea un problema de que vengan más o menos. El problema es mucho más grave de lo que nos pensamos. Por dar un ejemplo, una vecina argentina me decía el otro día que quería cambiar de colegio al niño porque había muchos inmigrantes ¿? por lo que el nivel educativo era más bajo. Creo que el sistema podrá aguantar lo que pueda aguantar, pero no más de lo que pueda soportar. En esto me refiero principalmente a educación, sanidad y los principales servicios que ofrece el sistema público.
Mi padre como sabéis, se quedó.